08.03.2016 / Actualidad
La manzana está deliciosa así, tal y como viene del árbol. Además, con la amplia variedad de tipos de manzana que hay, es casi imposible aburrirse de ellas ya que cada una tiene su sabor característico. Sin embargo, además de poder comerla a mordiscos, esta fruta es un perfecto ingrediente en la elaboración de postres. Nuestros favoritos son la manzana asada y la tarta de manzana al estilo Petritegi, pero la repostería nos ofrece otras muchas posibilidades. Os dejamos algunas ideas para elaborar platos dulces a base de manzana.
Manzana asada:
Es un postre sencillo, sí, pero también tiene su secreto. En Petritegi utilizamos la manzana reineta para su elaboración ya que es una manzana con mucha consistencia y con un toque ácido, lo que la hace ideal para esta preparación. Pero si no tienes manzana reineta, no te preocupes. La variedad Golden también puede servirte, puesto que tiene un sabor neutro y una textura lo bastante dura como para prepararse asada. Lo que no te recomendamos es utilizar variedades más dulces, porque se deshacen enseguida en el horno.
Después de lavarlas bien, retiramos la parte superior donde empieza el tronco dejando una pequeña cavidad. Colocamos todas las manzanas en una bandeja de hornear y una por una vamos añadiéndole una cucharadita de azúcar y humedeciéndolas con una mezcla de agua con vinagre de manzana o en su defecto de limón. Después de haber precalentado el horno a unos 190-200° las horneamos durante 25 ó 30 minutos, según el tamaño de las manzanas.
Una vez terminada puedes servirla directamente o esperara que temple y prueba a decorarla con caramelo líquido ó sirope.
Tarta de manzana:
La tarta de manzana es una receta que tiene muchas versiones aportando a este delicioso postre diferentes texturas. Las hay más esponjosa, tipo bizcocho, o más consistentes, elaboradas sobre una base de masa quebrada. Algunas llevan la manzana por encima y otras las llevan como relleno.
En Petritegi tenemos nuestra propia receta de tarta de manzana para la que utilizamos hojaldre y crema pastelera. Este postre, al igual que la manzana asada, lo servimos durante los meses de octubre y noviembre, coincidiendo con la época de recogida de la manzana. Platos de temporada que elaboramos con la fruta de nuestros manzanales.
Manzanas rellenas:
Las manzanas también pueden presentarse rellenas. ¿De qué? Pues prácticamente de todo lo que se te ocurra. Por ejemplo, de cualquier tipo de queso: mascarpone, de cabra, queso azul, de untar, etc. La crema o la nata, también son dos ingredientes muy utilizados para rellenar manzanas. Para los más golosos, el chocolate, y los que buscan algo menos calórico pueden optar por otras frutas.
Compota de manzana:
La compota es una de las formas más saludable de preparar la manzana. Es de fácil digestión, muy apta para niños y mayores, y muy fácil de elaborar. Solo necesitas llevar a ebullición un poco de agua y añadir los trozos de manzana sin piel. Dejarlo cocer a fuego lento hasta que se ablande la fruta y ¡listo! Se le puede añadir canela, vainilla, azúcar… al gusto del consumidor. Una receta ideal para cualquier estación del año. En invierno puedes consumirla templada y en verano bien fresquita. Incluso puedes probar a mezclar diferentes frutas: compota de manzana y pera, de manzana y ciruela, de plátano con manzana, etc.
Otras tartas:
Tampoco necesariamente la manzana tiene porque ser el ingrediente estrella de unan tarta. Puede simplemente ser un complemento. Prueba a añadir un poco de manzana a una tarta de queso o a una tarta de chocolate. ¡Las combinaciones son innumerables!
